Tiempo que se tarda desde Iruya a Humahuaca:
Frecuencia de los colectivos desde Humahuaca a Iruya.
Regreso desde Iruya:
Para el acceso a este lugar, se puede hacer en vehículo propio o en colectivo.
En Vehiculo propio o en colectivo existe una única forma de hacerlo, pasando la provincia de Jujuy, recorriendo la ruta Nacional Nº 9, a 26 km. De la capital de Humahuaca está el cruce de rutas, donde se lee "Iruya 54 Km". Siguiendo el camino indicado, se llega a la estación Iturbe Provincia de Jujuy, distante a 8 km. del cruce mencionado. Desde allí siempre por camino de tierra, se llega al paraje denominado "ABRA DEL CONDOR" a 4000 msnm, límite de la provincia de Salta y Jujuy.
En el Abra del Cóndor comienza el descenso de 1220 m. En 19 Km (distancia del Abra a Iruya).
A lo largo de estos 19 Km, el visitante se sumerge en la variedad más insólita de colores, que van del verde agreste al morado o violeta, pasando por el amarillo y el azul metálico. La montaña, en conjunto con las quebradas, ofrece a la vista, caprichosas y curiosas formas que se desdibujan en el lecho del río Colanzulí, a cuya vera corre el camino.
Al llegar a Iruya, la primera impresión es de un pueblo "colgado en la montaña", o más bien, de una isla, ya que está rodeado por los ríos Colanzulí -o Iruya- y Milmahuasi.
Se destaca su edificación colonial con callejuelas estrechas y sus paisajes de imponentes vistas panorámicas. En sus proximidades se encuentran las ruinas del (se pronuncia en la zona como pucara y no "pucará") pucara de Titiconte. Y las distintas comunidades que se encuentran a en sus alrededores como: San Isidro, San Juan, Chiyayoc, Rodeo Colorado, etc.
Aquí, los habitantes, vestimentas, costumbres y viviendas han mantenido su tradición a lo largo de 250 años. El poblado conserva sus calles angostas y empedradas, con casa de adobes, piedras y paja.
El camino carretero termina, solamente a lomo de mula es posible realizar un viaje al interior del departamento, donde se presenta el paisaje montañoso en toda su agresividad y magnitud. Siguiendo el lecho de los que surcan el interior, se aprecian quebradas de diferentes formas y colores. La piedra laja, en algunos tramos ha formando paredes de contención del río